Capitulo 12: Compras y dudas.

Cansadas por el viaje y aun tristecillas decidieron quedarse en casa a ver películas juntas todo lo que restaba del día, caminaron cada una a sus cuartos y se pusieron ropa cómoda y prendieron el televisor en la sala, como el día estaba algo nublado trajeron cobijas y almohadas y se acurrucaron en el sillón, después de un rato a Fer, para no variar, le dio hambre, saltó de entre las cobijas y se dirigió a la cocina y buscó en la alacena, no había nada, entonces buscó en el refrigerador y tampoco encontró nada, estaban completamente vacíos. Aterrada corrió hacia donde estaban todas las demás y...

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Fer: NO HAY COMIDA!!! Gritó casi llorando.
Sara: Como que no hay comida? Preguntó desconcertada.
Fer: Te lo juro no hay ni agua! Gritó completamente desesperada.
Dani: Eso no puede ser posible, al menos unas galletas tiene que haber. Dijo despreocupada tratando de no hacer crecer el drama de su amiga.
Sofía: Vamos a ver. Dijo mientras se levantaba y caminaba hacía la cocina. Efectivamente estaba todo vacío.
Fer: Lo ven, no estaba exagerando. Dijo ya un poco más tranquila mientras todas se miraban atónitas.
Dani: Tranquilas, hay que hacer super y problema resuelto. Dijo muy tranquila.
Sofía: Si, vistámonos y vamos a comprar.
Sara: Ahh, no niñas, era nuestro día de flojera. Dijo haciendo pucheritos.
Dani: Si Sara, pero no podemos quedarnos sin comer nada.
Dijo lamentándose.
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Todas se vistieron nuevamente y se dispusieron a salir, tomaron sus llaves, celulares y tarjetas de crédito y se dirigieron a la recepción a pedir información de un centro comercial, la señorita encantada les dio información y ofreció pedirles un taxi que viniera por ellas y las llevara, pero como estaba muy cerca decidieron ir caminando y mejor regresar en taxi, cuando por fin llegaron tomaron un carrito y en él pusieron: Leche, huevos, jamón, cereal, yogurt, pan, azúcar, carne, pastas, mil sobres de palomitas de maíz, mucho refresco, comida instantánea, cada quien llevo sus bebidas favoritas y sus botanas de preferencia y por último subieron al carrito 10 botes de helado de diferentes sabores unos incluso repetidos. Pagaron y conforme a los planes tomaron un taxi de regreso a lo que ahora llamarían casa.

*Los chicos:

Louis: Hazza, te puedo contar algo? Preguntó volteando a ver a su amigo.
Harry: Claro que sí! Que sucede? Le contestó con una sonrisa.
Louis: No me lo vas a creer pero... no dejo de pensar en Dani. Dijo triste.
Harry: Te entiendo, me pasa igual con Sof. Dijo mientras tomaba el hombro de su amigo sabiendo lo que sentía.
Louis: Pero que podemos hacer, no puedo solo marcarle y pedirle que venga hasta Londres solo porque tengo ganas de verla y conocerla... Dijo triste, ya que esa era la única idea que había tenido.
Harry: Tranquilo, ya veremos cómo encontrarlas de nuevo. Dijo decidido.
Zayn: Encontrar a quien? Pregunto sonriente.
Louis: A las chicas de México, no podemos dejar de pensar en ellas. Dijo mientras bajaba la mirada.
Niall: Enserio las vamos a buscar? Preguntó integrándose al dialogo.
Liam: A quien vamos a buscar? Pregunto entrando en la habitación.
Zayn: A las chicas. Exclamó sonriente.
Liam: Las de México? En serio? Pregunto contento.
Harry: Si, tenemos que verlas otra vez, no puede acabarse así. Dijo con una sonrisa de ilusión.
Niall: tengo algo que contarles chicos. Dijo algo avergonzado agachando la cabeza.
Louis: que sucede amigo? Pregunto preocupado por su reacción. Pasa algo malo?
Niall: No solo que... sé que debí contárselos antes, pero no sabía cómo hacerlo. Dijo mirándolos esta vez.
Harry: Que pasa Nialler? Preguntó expectante.
Niall: Va a ser difícil encontrar a las chicas. Aseguro.
Liam: Porque lo dices? Solo tenemos que volver a México.
Niall: No, es que las chicas no están en México. Afirmó.
Zayn: Como sabes eso? Preguntó intrigado.
Niall: Es que... me he estado mensajeando con Fer.
Louis: Que?! Desde cuándo? Preguntó algo molesto por no haberes contado.
Niall: Desde el lunes después de que regresamos a Inglaterra. Contestó.
Harry: Como hiciste eso y no nos contaste Nialler, prometimos contarnos todo. Agrego algo decepcionado.
Niall: Lo sé chicos, perdón... ya hace 4 días que no sé nada de ella. Dijo triste.
Liam: Ya no has hablado con ella? Preguntó.
Niall: No, la última vez me dijo que saldría de viaje y decidí dejar de hablarle y borre los números de todas. Pensé que sería buena oportunidad de olvidarlas. Agregó.
Zayn: De viaje? Donde podrán estar? Preguntó suponiendo que estarían las cuatro juntas sin obtener respuesta.*

Cuando acabaron de acomodar todo en la cocina las chicas estaban verdaderamente agotadas, y en vez de ver películas decidieron irse a dormir, ya mañana sería otro día.

Capitulo 11: Coincidencia? No lo creo!

Cada una de las chicas había abordado en diferentes líneas y diferentes horarios y pasaron 10 horas de vuelo sin imaginarse que este sería el mejor viaje de sus vidas, todo gracias a sus padres que habían preparado esta sorpresa para ellas.

Los chicos ya estaban de regreso instalados en su departamento en Londres, aun esperando recuperar sus vidas normales, pensaban en como ese concierto había cambiado por completo sus vidas, y con eso muchas de sus prioridades. Niall y Fer ya no se habían mensajeado ni nada porque ella le había contado que saldría de viaje. Entonces el rubio decidió tomarlo como una oportunidad para dejar de pensar en ella. Mientras los demás seguían sin quejarse, en tan solo un día todo parecía retomar su curso.

Tras 10 horas de viaje Sara fue la primera en tocar tierras inglesas, y no lo supo hasta que bajo del avión y escucho a la gente hablar, estaba algo aturdida por el viaje y los sollozos que había estado soltando durante el mismo, aun tenía miedo ni siquiera sabía a dónde ir o a quien recurrir. Cuando decidió tomar sus maletas y comenzó a caminar, totalmente aterrada y antes de cruzar la puerta de salida quiso llamarle a su mejor amiga, pero decidió no hacerlo y cruzo la puerta. Al salir encontró a un señor que sostenía un letrero con su nombre, ella desconcertada decidió acercarse a él y preguntó qué era lo que pasaba, él inglés le explicó todo y le dijo que su padre lo había contratado para llevarla a su departamento en el cual ella pasaría casi un mes. Aun con miedo siguió todas las órdenes del hombre que al cabo de unos minutos la dejó en la entrada del edificio céntrico, la ayudó a bajar su equipaje, y se marchó sin que ella se diera cuenta por estar contemplando la entrada el edificio, tomo sus maletas y entró, pasó a la recepción y la señorita muy gentilmente le preguntó su nombre y cuando ella lo hizo, le tendió las llaves de su habitación despidiéndola con una sonrisa y deseándole feliz estancia. Sara seguía sin comprender nada de lo que pasaba, pero como no tenía más a donde ir, subió el elevador hasta su departamento. Abrió la puerta y quedó maravillada con lo grande que era, pensaba que sus padres se habían lucido esta vez y decidió instalarse, el departamento era tan grande, elegante y tenía una hermosa vista a través de un ventanal que dejaba ver todo el interior desde afuera, le pareció extraño que el departamento tuviera tantas habitaciones pero escogió la más grande y comenzó a desempacar.

Media hora después de eso Sofía arribó, tranquila y decidida a pasarlo excelente camino hacía a fuera para ver donde se encontraba, cuando finalmente encontró a aquel hombre que sostenía un letrero con su nombre, ella se acercó a él y fresca le preguntó qué era lo que tenía que hacer, él la saludo cordialmente ayudándola con sus maletas, y como con Sara, al cabo de unos minutos la dejó en la entrada del edificio donde Sofía se hospedaría, con la sonrisa que siempre acompaña su rostro entró cargando todas las maletas con facilidad, dirigiéndose al señor que atendía el cual le preguntó su nombre y cordialmente le entregó la llave de su espacio, le dio las gracias y se marchó.

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Mientras tanto en el aeropuerto el señor de costumbre sostenía ahora un letrero con dos nombres, adentro del aeropuerto Fer caminaba hacia la salida mientras vio la figura de una chica gritona intentando cargar todas la maletas que tenía y con el gran espíritu de servicio que poseía se acerco para ayudarle. Sorprendida gritó y chilló mientras abrazaba a su mejor amiga Dani. Después de varios gritos más decidieron salir a tomar un taxi para ir por algo de comer ya que a Fer no le quedaban más donas, cuando salieron dispuestas al taxi vieron a ese hombre, y se acercaron a él, como era costumbre las recibió cordialmente y las bajó en la entrada de un edificio. Ellas no sabían lo que pasaba, juntas y cargadas de maletas entraron pensando que las dos podrían quedarse ahí. Una señorita les pidió sus nombres y, como a las otras dos chicas les entregó un par de llaves.
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Cuando Sofía llegó y abrió la puerta del departamento, Sara escuchó un ruido y espantada corrió a ver qué pasaba y expectante miró hacia la puerta que se abría lentamente. Vio entrar a su mejor amiga y corrió a abrazarla sorprendida. Mientras las dos gritaban y se abrazaban dando saltitos, un ruido de cerradura interrumpió su festejo y cuando se giraron hacía la puerta, vieron entrar a sus otras amigas. Era increíble gritaban y se abrazaban sin poder creer que sus padres habían preparado todo eso para ellas. Felices decidieron instalarse cada una en su habitación.